jueves, 29 de diciembre de 2016

MUSICOTERAPIA


Se estima que el 80% de las enfermedades modernas tienen su origen en el estrés y suponen como mínimo el 75 % de las consultas al médico de cabecera.
El estrés se define como: estado de tensión provocado por situaciones agobiantes que originan reacciones psicosomáticas o trastornos psicológicos.
A medida que la preocupación por la seguridad, eficacia y coste de los medicamentos ha aumentado, hay un creciente interés por los tratamientos sin medicamentos, de los cuales el entrenamiento de la relajación es un ejemplo.
En la depresión, la persona presenta manifestaciones comunes: tiene una valoración negativa de sí misma, valoración negativa del mundo que le rodea y valoración negativa de su futuro en el mundo. Se siente incapaz de afrontar sus dificultades de una forma adecuada y positiva y, en consecuencia, se produce la depresión. La utilización de las técnicas de relajación es muy importante, como estrategia que ayuda a la persona a descubrir más fácilmente la causa que le produce el pensamiento negativo ante determinada situación
La relajación se puede entender como un estado o respuesta percibidos positivamente en el que una persona siente alivio de la tensión o del agotamiento. Se usa con frecuencia respecto a los músculos, lo cual liberar la tensión y el alargamiento de las fibras musculares, en contraposición al acortamiento que acompaña a la tensión o contracción muscular.
Las técnicas cuyo principal propósito es facilitar la relajación se denominan primarias. Los métodos «musculares» pertenecen a esta categoría. Por lo  tanto, hay que tener en cuenta también que  la palabra «relajado» se emplea para referirse a los músculos flojos o bien a los pensamientos sosegados.
Los objetivos de la relajación son los siguientes:
- Como medida de prevención, para proteger a los órganos del cuerpo de un desgaste innecesario, y especialmente a los órganos implicados en las enfermedades relacionadas con el estrés.
- Como tratamiento, para facilitar el alivio del estrés en condiciones tales como hipertensión idiopática, dolor de cabeza, asma, etc.
- Como una técnica para poder hacer frente a las dificultades, para calmar la mente y permitir que el pensamiento sea más claro y eficaz.

Por lo tanto, podemos entender la conexión entre estas tres definiciones y la fisioterapia, ya que es importante que nuestro paciente que se puede encontrar en un estado de depresión o estrés se encuentre en un estado de relajación que le permita desconectar de sus problemas y centrarse en su recuperación.
Hemos realizado este trabajo sobre una sesión de relajación uniéndolo con la musicoterapia, entendida también como método de relajación.

INTRODUCCIÓN A LA MUSICOTERAPIA

La musicoterapia, como su propio nombre define, trata de realizar un tratamiento o terapia mediante la utilización la música o cualquiera de sus elementos (sonido, ritmo, armonía,...) ya sea en un paciente o de forma grupal, marcándonos unos objetivos a lograr.
Estos pueden ser, principalmente, buscar un proceso para facilitar y promover la comunicación, las relaciones, el aprendizaje, el movimiento, la expresión, la organización u otros objetivos terapéuticos que se puede lograr mediante el estímulo musical y sus añadidos. Con todo ellos estamos consiguiendo   cubrir unas necesidades que pueden ser físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas.
Con lo cual, podemos decir que tiene como fin desarrollar potencialidades y/o restaurar las funciones del individuo de manera tal que éste pueda lograr una mejor integración intra y/o interpersonal y consecuentemente una mejor calidad de vida a través de la prevención, rehabilitación y tratamiento.

ORIGEN

Este término surge en el S. XX, sin embargo, tiene sus orígenes mucho tiempo  antes. A nadie se le hace difícil imaginarse los antiguos ritos mágicos de curación. Así los primeros escritos sobre curación mediante la música proceden de los antiguos egipcios, donde se hablaba de sanar cuerpo, mente y alma.
Es en la antigua Grecia cuando se le aplican unos fundamentos más científicos de la mano de filósofos como Aristóteles o Platón, al igual que antigua Roma, donde se relacionaba la música con la curación concreta de enfermedades.
Son muchos los autores que han otorgado beneficios para la salud a la música a lo largo de los siglos y estos cada vez desde un punto más científico. Pero debemos hacer destacar la relevancia de Emile Jacques-Dalcroze, quien a mediados del S. XX sentará las bases de lo que hoy se conoce como musicoterapia. Este dijo que organismo humano es susceptible de ser educado conforme al impulso de la música. A partir de entonces serán muchos los educadores y terapeutas que irán añadiendo nuevas características hasta llegar a lo que hoy conocemos como musicoterapia. En EE. UU.  tras la Primera Guerra Mundial, los hospitales de veteranos contratan músicos como ayuda terapéutica. Esta valiosa experiencia sirvió para que los médicos la tomaran en cuenta y en 1950 se fundó la Asociación Nacional de Terapia Musical, la cual edita una revista, realiza un congreso anual e inicia la formación de terapeutas musicales. A continuación se siguen creando asociaciones en distintos países y con ello se crea un continuo crecimiento de esta terapia. Si bien, todavía se encuentra en desarrollo y sobre todo con la necesidad de ser más difundida.


APLICACIONES DE LA MUSICOTERAPIA


Las aplicaciones de la Musicoterapia (MT) en el ámbito de la Medicina son múltiples.
Dentro de las enfermedades mentales, en el Alzheimer concretamente, la MT resulta una herramienta óptima para el tratamiento de la agitación en pacientes institucionalizados, en particular si la música es individualizada (relacionada con recuerdos especiales positivos de los pacientes) e interactiva (que incluye palmas, canto y baile) (1).

En la esquizofrenia, la MT se ha utilizado como complemento de la terapia durante décadas, ya que mejora el efecto del tratamiento de los síntomas negativos y el estado de ánimo. Sobretodo, tiene efecto en personas cuya enfermedad tiene un curso crónico (2).

La música también puede provocar cambios en la actividad cardiaca y la presión arterial. Las frecuencias cardiacas y respiratorias son más altas en respuesta a la música emocionante, en comparación con la música tranquilizante. También puede reducir el dolor y la ansiedad en pacientes con problemas del corazón. Aunque en este campo es necesaria más investigación (8).

Incluso en pacientes con cáncer de mama que van a ser sometidas a cirugía, la música puede afectar en la ansiedad, las secuelas de la anestesia, el tiempo de recuperación y en la satisfacción de las pacientes tras la cirugía ambulatoria (9).

En algunos programas de Rehabilitación de consumo de sustancias, la terapia musical se emplea, junto con terapia artística, como parte del tratamiento alternativo y complementario a la medicación (10).

Durante una cirugía, tanto niños como adultos pueden experimentar dolor, ansiedad y angustia, pero como no siempre es posible evitar este dolor con analgésicos, hay interés en conocer otras intervenciones no farmacológicas, como la terapia musical, tanto en vivo como grabada. Es una intervención no invasiva, barata y útil para reducir el dolor, la ansiedad, la angustia y mejorar la relajación, sobretodo en niños con cirugía.

En pacientes ingresados en UCI con asistencia respiratoria aguda por insuficiencia respiratoria, la terapia musical produce una reducción de la ansiedad, y de la frecuencia e intensidad de sedación.

Mediante EEG se comprobó que con pacientes en coma tras lesión traumática del cerebro, la musicoterapia tiene un efecto sobre la promoción de recuperar la conciencia.

MUSICOTERAPIA APLICADA AL ESTRÉS Y LA DEPRESIÓN


Musicoterapia, una modalidad terapéutica para el estrés laboral.

   
   En este estudio se utiliza música relajante (voz pausada y melódica, instrumentos de cuerda, ritmo poco marcado y tiene ciertas semejanzas con las canciones de cuna), antidepresiva (lleva al paciente desde una estado deprimido con música que sugiere tristeza y depresión, hasta un estado de alegría) y ansiolítica (la música está diseñada para llevar al paciente de un estado de ansiedad a un estado de sedación). Se obtuvieron resultados muy positivos aplicando esta técnica en pacientes con estrés laboral (aplicado a empresarios y personal médico), hay una disminución en el ausentismo laboral, hábito de fumar, disminución de la tensión emocional y de la ansiedad, y un aumento de la satisfacción laboral.

         Musicoterapia para la depresión.

    
    Estudio examina la eficacia de la musicoterapia comparando la atención estándar sola en personas con depresión y compara los efectos de la musicoterapia frente a otras terapias psicológicas o farmacológicas. De cinco estudios que cumplieron los criterios de inclusión, cuatro informaron sobre una mayor reducción de los síntomas de depresión entre los que recibieron musicoterapia que a los que recibieron atención estándar. El resultado del estudio indica que la musicoterapia es aceptada por las personas con depresión y se asocia a mejoras en el estado de ánimo, no es posible estar seguro acerca de su eficacia debido a la baja calidad de la metodología de los estudios.

Efectividad de la intervención con musicoterapia en la relajación y ansiedad de pacientes con asistencia ventilatoria.

Se dividen los pacientes en dos grupos: a uno se le asigna una sesión de musicoterapia de 30 minutos y al otro un periodo de descanso, se estudia la ansiedad, frecuencia cardiaca y respiratoria. Los sujetos que recibieron musicoterapia con el tiempo disminuyen la frecuencia cardiaca y  respiratoria en comparación con los sujetos del grupo control, una única sesión de la técnica demostró ser eficaz para disminuir la ansiedad y promover la relajación  durante el periodo de la intervención.

Intervenciones de música para mejorar los resultados físicos y psicológicos en pacientes con cáncer.


Estudio de ensayos controlados aleatorios de intervenciones con música para mejorar los resultados psicológicos y físicos en pacientes adultos y pediátricos con cáncer, se excluyeron pacientes sometidos a biopsias y aspiración con fines diagnósticos. La revisión sistemática indica que las intervenciones con música pueden tener efectos beneficiosos sobre la ansiedad, el dolor, la fatiga y la calidad de vida en personas con cáncer, puede tener un pequeño efecto sobre la frecuencia respiratoria y presión arterial. Los resultados deben ser interpretados con precaución ya que en la mayoría de los ensayos a estudio se encontraba un alto riesgo de sesgo.

Comparación de los movimientos con la música, actividades rítmicas y juegos de competición sobre la depresión, el estrés, la ansiedad y la ira de las mujeres en rehabilitación por abuso de sustancias.


El estudio investiga los efectos de tres tipos de intervenciones de musicoterapia en los niveles de la depresión, el estrés, la ansiedad y la ira en mujeres que se encuentran en rehabilitación por el abuso de sustancias. La intervención se hizo 2 veces a la semana durante 6 semanas, se aplicaba cada técnica (movimiento con la  música, actividades rítmicas y juegos competitivos) 4 sesiones durante 2 semanas, se medían los niveles de ira y ansiedad después de cada intervención.  No hubo diferencias significativas entre los diferentes tipos de intervención, los individuos reportaron una disminución de la depresión, el estrés, la ansiedad y la ira inmediatamente después de la sesión.

SESIÓN DE RELAJACIÓN CON MÚSICA


1º Huella del cuerpo.
Nos tumbamos en la colchoneta, cerramos los ojos e intentamos relajarnos y olvidarnos de lo que nos rodea, solo vamos a centrarnos en sentir nuestro cuerpo.  Vamos a observar cómo está nuestro cuerpo apoyado sobre la colchoneta. Iremos sintiendo cada de él analíticamente para observar cuales apoyan más y en cuales dejamos menos peso.
  • Nombraremos cada parte del cuerpo empezando de los pies hasta la cabeza para que se vayan centrando en ellas (apoyos, rotaciones, flexiones,...)
2º  Respiración.
Le pediremos que respire lentamente, notando su respiración, como es (abdominal torácica,...)
Después le pediremos respiración abdominal (puede poner una mano en el
pecho y otra en el abdomen), que hinche y deshinche el abdomen, se repite pero ahora torácica.
Una vez controladas ambas, vamos a combinarlas:
  • Cogemos aire hinchando el tórax, manteniendo este, lo llevamos al abdomen.
  • Lo soltamos 1º de abdomen (manteniéndolo del tórax) y después del tórax.
3º  Relajación.
Trabajaremos con ciclos de tensión-relajación: 5 segundos de tensión y 10-15 segundos de relajación.
Ahora volveremos a centrarnos en nuestras piernas, concretamente los pies y tobillos.
  •          Presionamos nuestro tobillo izquierdo contra la colchoneta. Notamos como esta se hunde contra él, ¿la tensión se traslada a toda la pierna? ¿se mantiene solo en el tobillo? relajamos.
  •  Haremos lo mismo con el derecho.  ¿tenemos la misma sensación que en el izquierdo?
  • Intentamos tocar la colchoneta con los dedos de nuestro pie izquierdo, no tenemos que despegar los talones ni doblar las rodillas, mantenemos lo máximo que cada uno pueda y relajamos. ¿notamos tensión?
  • Repetimos la misma acción con los dedos del pie derecho, de nuevo, buscamos las diferencias ¿las hay?
  • A continuación, subimos por nuestras piernas y nos quedamos en nuestras rodillas. Nos centramos en la izquierda, vamos a intentar que el espacio entre la rodilla y la colchoneta desaparezca. ¿notamos la tensión en nuestros muslos?
  • Repetimos el ejercicio con la rodilla derecha ¿notamos diferencia?
  • Subiremos hasta la zona de nuestra cadera. Llevamos nuestro muslo izquierdo hacia el pecho y nos ayudamos de nuestras manos. ¿Donde notáis la tensión? ¿lumbares, glúteos, muslos,..? relajamos y bajamos de nuevo la pierna
  • De nuevo repetimos con la derecha y vemos si existen diferencias.
  • Ahora subimos de nuevo la pierna izquierda y luego a la derecha, nos sujetamos con las manos ambas piernas y empezamos a hacer suaves balanceos de un lado a otro. empezamos levemente y vamos aumentando el movimiento. ¿Qué ocurre con nuestra columna al hacer esto?
  • Ahora vamos a pasar a nuestras manos. Cerramos la mano izquierda y apretamos. ¿donde notas la tensión? ¿se queda en el puño? ¿va subiendo por el antebrazo? ¿llega hasta los hombros?
  • Vamos a repetir lo mismo con la derecha ¿tenemos la misma tensión en ambos brazos?
  • A continuación vamos a pegar nuestro brazo izquierdo al cuerpo, doblamos nuestros codos y presionamos este hacia la colchoneta ¿Notas como este se hunde en la colchoneta? ¿la tensión se traslada a los hombros? ¿llega al cuello?
  • Repetimos el mismo gesto con el brazo derecho, pegando al cuerpo y presionando el codo
  • Con los brazos relajados a los lados del cuerpo, intentaremos unir las escápulas. ¿qué notamos? ¿se nos eleva el pecho? ¿notamos molestias en la espalda?
  • Vamos a pasar a nuestro cuello, con la barbilla intentaremos tocarnos el pecho para borrar el espacio que hay entre la colchoneta y el cuello. ¿Hay tensión en la parte de delante del cuello o por detrás?
  • Ahora vamos a llevar la barbilla hacia el techo para aumentar el espacio que hay entre nuestro cuello y la colchoneta. De nuevo, ¿es distinta la tensión a los movimientos anteriores?
  • Llevamos la cabeza hacia la izquierda y manteniendo los ojos cerrados acompañamos el movimiento con la mirada. ¿notamos algún tope? ¿hay algo que nos impida hacer más rotación, dolor, tensión,..?
  • Repetimos el movimiento hacia la derecha. ¿Hay alguna diferencia con el lado izquierdo?
4º Vuelta a la normalidad:
Realizamos 3 respiraciones profundas, volvemos a notar la huella de nuestro cuerpo ¿Hay alguna diferencia? ¿Es igual que al inicio de la sesión? ¿Siento mi cuerpo más relajado?
Abrimos los ojos y nos vamos incorporando poco a poco. Primero nos colocamos de lado, después subimos nuestro cuerpo hasta quedarnos sentados.



BIBLIOGRAFÍA


  1. José Carlos Millán-Calenti, Laura Lorenzo-López, Begoña Alonso-Búa, Carmen de Labra, Isabel González-Abraldes, Ana Maseda. Optimal nonpharmacological management of agitation in Alzheimer’s disease: challenges and solutions. Clin Interv Aging. 2016; 11: 175–184.
  2. Ping-Tao Tseng, Yen-Wen Chen, Pao-Yen Lin, Kun-Yu Tu, Hung-Yu Wang, Yu-Shian Cheng, Yi-Chung Chang, Chih-Hua Chang, Weilun Chung, Ching-Kuan Wu. Significant treatment effect of adjunct music therapy to standard treatment on the positive, negative, and mood symptoms of schizophrenic patients: a meta-analysis. BMC Psychiatry. 2016; 16: 16. Published online 2016 Jan 26.
  3. Carmen R. Victoria García-Viniegras, Jamín Rodríguez Lartínez, Delfin Baron Ruiz, Noemí Cárdenas Echevarria. Musicoterapia, una modalidad terapéutica para el estrés laboral. Rev Cubana Med Gen Integra. 1997; 13(6).
  4. Anna Maratos, Cristiano Oro, Xu Wang, Mike Crawford. Musicoterapia para la depresión. Cochrane library. 2008.
  5. Chian L. Efectividad de la intervención con musicoterapia en la relajación y ansiedad de pacientes con asistencia ventilatoria. Elsevier. 1998; 27 (3): 169-76.
  6. Bradt J, Dileo C, Magill L, Teague A. Intervenciones de música para mejorar los resultados físicos y psicológicos en pacientes con cáncer. Cochrane Database Syst Rev. 2016.
  7. Cevasco AM, Kennedy R. Comparación de los movimientos con música, actividades rítmicas y juegos de competición sobre la depresión, el estrés, la ansiedad y la ira de las mujeres en rehabilitación por abuso de sustancias. J Music Ther. 2005; 42(1): 64-80.
  8. Koelsch S, Jäncke L. Music and the heart. Eur Heart J. 2015 Nov 21;36(44):3043-9.
  9. Jaclyn Bradley Palmer, Deforia Lane, Diane Mayo, Mark Schluchter, Rosemary Leeming. Effects of Music Therapy on Anesthesia Requirements and Anxiety in Women Undergoing Ambulatory Breast Surgery for Cancer Diagnosis and Treatment: A Randomized Controlled Trial. J Clin Oncol. 2015 Oct 1; 33(28): 3162–3168.

Realizado por:
Mercedes García
Ivonne Loaiza
Laura Pamies
Nuria Requena
Para la asignatura "Terapias Afines y Complementarias" del Grado de Fisioterapia de la Universidad Miguel Hernández de Elche.